Conducir bajo la influencia se considera un delito menor de clase A, es un caso penal y se castiga con cárcel. Estas no son solo multas de tráfico y es importante mantener limpio su registro. Tener un abogado experimentado en DUI a su lado desde el principio es crucial para garantizar que el proceso sea justo, que pueda montar una defensa efectiva y que esté bien informado.

Cuando se someta a pruebas de sangre, aliento u orina que revelen drogas ilegales o no recetadas, o si tiene un contenido de alcohol en la sangre que exceda el límite legal, o si se niega a hacerse la prueba, es probable que se suspendan sus privilegios para conducir. La duración de la suspensión depende de los hechos de su caso.

Un juez generalmente no tiene nada que ver con sus privilegios de conducir. Si puede conducir depende del Secretario de Estado de Illinois. Si el Secretario de Estado suspende su licencia, comenzará a partir del día 46 después de que la policía le emita la notificación adecuada de la suspensión.

En la mayoría de los casos, el conductor arrestado por DUI es elegible para un permiso de conducir con dispositivo de monitoreo (MDDP) que le permite conducir durante toda la duración de la suspensión. Sin embargo, obtener el MDDP es un proceso de tres pasos que requiere tiempo, dinero y la instalación de un BAIID (dispositivo de bloqueo de encendido por respiración) en su vehículo. Es importante comenzar el proceso lo antes posible para asegurarse de tener el MDDP cuando comience su suspensión.

En algunos casos, es posible impugnar la suspensión de sus privilegios de conducir. La ley prevé situaciones en las que un abogado puede solicitar al tribunal que elimine la suspensión. Sin embargo, hay un tiempo limitado dentro del cual se puede presentar la petición. Si no se presenta una petición para rescindir la suspensión antes de la fecha límite, se renuncia a cualquier impugnación de la suspensión.

La mayoría de la gente piensa en pelear su DUI en un juicio. Si bien esta es una opción en muchos casos, también hay otras formas de ganar su caso.

La Cuarta Enmienda a la Constitución de los EE. UU. prohíbe registros e incautaciones ilegales. Como corolario de esa regla está la Regla de Exclusión. La regla de exclusión establece que, en general, una persona que es detenida o registrada ilegalmente no puede ser procesada con las pruebas obtenidas como resultado.

Un abogado experimentado en DUI puede evaluar si lo detuvieron o lo arrestaron ilegalmente. En muchos casos, podemos presentar impugnaciones exitosas de la Cuarta Enmienda que resultan en la desestimación de los cargos y la eliminación de la suspensión de sus privilegios de conducir.

La ley requiere que el gobierno divulgue cualquier prueba en su contra que posea antes de la fecha del juicio.

Una de las primeras cosas que suceden en la corte es que presentamos una moción de descubrimiento. Esta es una solicitud formal de evidencia. La fiscalía está obligada a entregar cualquier prueba que tenga relacionada con su caso. Esto puede incluir informes policiales, declaraciones de testigos, grabaciones de audio y visuales, resultados de análisis de aliento, orina y sangre, y más. La acusación incluso está obligada a presentar cualquier prueba en su poder que pueda demostrar su inocencia.

Obtener esta evidencia es fundamental para evaluar su caso y prepararse para las audiencias o el juicio. Tendrá la oportunidad de ver todas estas pruebas con nosotros antes del juicio. Después de revisar la evidencia juntos, diseñaremos un plan de ataque.

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